lunes, 21 de octubre de 2013

De pescados va el tema... Top Chef 3

Como la semana pasada el programa empezó con una prueba de fuego, la prueba donde los cocineros además de sus habilidades tienen que demostrar que son capaces de hacerlo muy rápido. Está semana tocó limpiar un bonito. Difícil opinar sobre todos en esta prueba, porque en el programa solo salieron los que Alberto Chicote consideró los mejores y los peores, del resto no se vieron casi imágenes. Así que confiaremos, por supuesto, en el buen criterio de Chicote al seleccionar a Miguel, Antonio Canales y Bárbara como los tres que mejor habían ejecutado la limpieza del bonito. Y creo que era evidente que Miguel tenía que estar entre los mejores, porque su bonito quedo perfecto. El suyo y el de Canales. Aunque igual de evidente fue el destrozo que Borja hizo del suyo, y siendo de San Sebastían, no tiene perdón. ¡Con los bonitos que da el cantábrico y lo cerca que lo tiene!. El otro que no le gustó a Chicote fue el de Hung Fai, pasó de los lomos y lo troceó, sacando demasiadas migajas. 

Antonio Canales, Miguel y Bárbara. Los mejores en la prueba de fuego.
Rebote importante, por cierto, el que se pilló el "chino" que no le sentó nada bien que una de las mejores fuera Bárbara. Y tiene pinta de ser un tío humilde pero soltó frases como: "me van a decir a mí que Bárbara a limpiado el pescado mejor que yo", "me parece algo fuera de tono" o "nuestra compañera Bárbara es la que menos preparada está dentro del grupo". Rabieta ¿no?.

No quiero criticar porque no es mi estilo, pero se justificó diciendo que no está acostumbrado a esos cuchillos. Pero entiendo que ni él,  ni ninguno de los que están ahí, ni ningún cocinero cuando nos quitan los nuestros. La desventaja esa era para todos y no solo para él.

Elegidos los tres mejores, tenían que someterse a una segunda fase de la prueba para elegir al ganador. Tenían que hacer un tartar de bonito pero con una dificultad añadida, no podían probarlo, es decir, tenían que condimentarlo a ojo. La elección del ganador salió de una cata a ciegas de los propios concursantes, donde decidieron que el mejor era el de Antonio Canales. 

Canales consiguió la inmunidad y como privilegio pudo elegir a su pareja para la siguiente prueba. Prueba que consistió en elaborar un plato elaborado con pescados de descarte. Lo tenían que elaborar por parejas. Parejas que yo creo que con un poco de "malicia" eligió Chicote. 
Ángel León les presentó los pescados que tenían para elaborar y Canales, como vencedor de la prueba de fuego, decidió que pescado elaboraría cada grupo. 
Por cierto, he de confesar, no penséis que yo voy de listillo, porque seguro que todos me dan mil vueltas, que no conocía ni uno de los pescados que tenían para cocinar.


Los primeros en entrar a cocinar fueron Hung Fai y Antonio Canales, ellos eligieron (y fueron los únicos que pudieron hacerlo) la Breca. La elaboraron con un majado de higaditos y una picada de almendras y terminaron el plato con una ensalada fresca. El plato tenía buena pinta y la presentación molaba. A Hung Fai los nervios le volvieron a jugar una mala pasada. Tiró los hígados a la basura en un despiste, fileteó mal el primer pescado y se le notaba demasiado inquieto. Juan Pozuelo en el Almacén de Top Chef, le dijo a Hung Fai que un cocinero debe tener la capacidad de controlar los nervios y no le falta razón en absoluto.

Breca de Hung Fai y Antonio Canales.

Los segundos en aparecer por los fogones fueron Jesús y Javier, que les tocó elaborar la Herrera. Sigo pensando que Jesús es uno de los concursantes más fuertes del programa y eso se vio en el plato. La presentación era impoluta y Chicote dijo que el plato era "bestial". Lástima que la piel les quedara cruda. Me gustó muchísimo Javier, quiso que Jesús llevase las riendas del plato y disfruto desde el minuto cero de su compañero, diciendo que era un placer trabajar con él. El pescado lo acompañaron con un puré de calabaza, ali oli y una gelatina de hinojo.

Herrera de Jesús y Javier.
A continuación entraron Antonio Arrabal y Bárbara para elaborar según los entendidos el pescado más difícil de la prueba, la Lisa. En el resultado se notó que trabajaron de manera casi independiente, pero es que a Antonio no le gustó nada tener que trabajar con Bárbara. Dijo Arrabal que él le dejaba "su parte de protagonismo. Se ha puesto a jugar con sus verduritas y sus noodles". Desconexión total entre los dos, y Antonio con una cara delatadora de sus pocas ganas de formar pareja con la valenciana. 
La presentación regular y el resultado "poco uniforme" según Susi y Chicote.

Lisa de Antonio Arrabal y Bárbara.

La cuarta pareja era la formada por Borja y Begoña. Morbo desde el principio, ya que no se sabía como iban a trabajar después del encontronazo del día del hipódromo. Pero Borja estuvo en una sumisión absoluta de Begoña y juntos elaboraron un Buellit (pescado hervido) con la oblada que les asigno Canales. El resultado según Susi Díaz "incomestible", y es que el pescado se les quedo crudo. Pero si algo bueno hay que sacar de aquí es que la pareja limó asperezas y como buenos profesionales supieron trabajar en equipo a pesar de las diferencias.

Oblada de Begoña Y borja.
La última pareja la formaron Elisabeth Y Miguel para elaborar la Salpa (de este no me suena ni el nombre). Buen trabajo en equipo, buena presentación, el pescado como me gusta a mí, doradito por la piel. En fin, una pintaza de plato que acompañaron de cremoso de patata y caldo, pero que a los pescadores, que eran los que esta vez juzgaban, no les gustó. Consuelo para ellos tiene que ser para Chicote y Susi Díaz era un plato más que correcto.

Salpa de Elisabeth y Miguel.

Los pescadores votaron y decidieron que las parejas formadas por Hung Fai y Canales (aunque se libro por ser inmune), Miguel y Elisabeth y Borja y Begoña tuvieran que enfrentarse a la última prueba de esta semana, la de la eliminación.
La prueba consistió en elaborar un plato de "mar y tierra". Tenían como ingredientes obligatorios mero y pichón y el objetivo de saber congujarlos entre sí, es decir nada de platos combinados. Muerto se quedó el "chino" cuando vio el pichón. Y es que no lo había trabajado nunca, pero gracias a Dios y como dijo él "alguna vez he hecho pollo y me hago a la idea" (puntazos de Hung Fai). Pero la cosa no se quedó aquí, cuando todos estaban cocinando y con sus ideas ya montadas, les dan un ingrediente más para meter al plato, ¡una oreja! vamos que no era una cebolla que la metías en cualquier sitio, que era ¡una oreja!. Y el "chino" a punto del desmayo. Tampoco había cocinado nunca oreja así que más problemas para él.
 Acabo el tiempo y el jurado probó los platos. Increíble la presentación del plato de Begoña y según el jurado, el sabor también. Que plato más bonito y que ganas de que alguna mujer enseñara las uñas en el programa, por que estaban pasando, culinariamente hablando, demasiado desapercibidas. Chapeau por Begoña.
Otro a los que el jurado felicitó fue a Miguel y es que, que el chef del mar le diga que "el mero está de lágrima" es para que se le mojaran los calzoncillos, con perdón. 
Y por cierto, hablando de Miguel ya no puedo callarme más! He de ser sincero con vosotros y con él que se que me lee. Coincidí con él en el casting del programa, y fue en la persona que más me fijé. Yo tenía el número 204 y y él, el 231 (si no recuerdo mal). Y digo que me fijé en él, porque me dio la sensación de ser un tío chulo, crecido. Pero conforme se va desarrollando el programa he de pedir perdón, lo siento Miguel, me pareces un tío 10. Olé por tí y olé por lo que sabes y por como trabajas. Ya me has ganado. Es lo que tiene juzgar sin conocer... pero bueno, quien esté libre de pecado... Ojalá consiga un buen puesto.
Siguiendo con el concurso...A Elisabeth también le felicitaron por que lo que parecía un plato muy simple era un plato "muy complejo".

Pichonetto Meronatto de Begoña; Fusión de Mero y Pichón de Miguel; y carpaccio en tres texturas de Elisabeth.

Y los dos peores fueron Borja que al final hizo más bien un plato combinado y Hung Fai, que no supo cocinar bien el pichón y se le quedó duro.


De la mar el mero y de la.... de Borja; y Dim Sum de Hung Fai.

Y llegó el momento de eliminar. Esta vez se le notaba al jurado, o por lo menos a Chicote, jodido por tener que tomar esa decisión. Hung Fai era eliminado del concurso y creo que de forma justa, por que no tuvo su día desde el principio. Aunque también es cierto que Borja tampoco lo tuvo.

Antes de acabar me gustaría apuntar dos cosas muy breves.


Leí hace unos días este comentario de Begoña en su cuenta de Twitter. Me da muchísima pena que alguien que se ha apuntado a un concurso de cocina con toda la ilusión del mundo escriba esto. Creo entender con sus palabras, que si lo hubiera sabido no se hubiera apuntado a Top chef. 
Está claro que la televisión genera muchísimas opiniones, unas buenas y otras no tanto. Pero a mi forma de entender, este no es un concurso donde haya que valorar a los concursantes más allá de lo profesional. Y aun dentro de lo profesional dentro de unos limites. Aprovecho para pedir disculpas si algo de lo que he escrito hasta ahora ha ofendido a alguien de los que me leéis o a los propios concursantes. Y para tí Begoña todo mi apoyo, eres una máquina y no creo que a estas alturas tengas que demostrar nada a nadie.

Para acabar quiero hacer mención a la campaña de Ángel León "Peces al Banco", con la que quiere llegar a acuerdos con pescadores para que los miles de kilos de pescado  de descarte (sin valor comercial) que se tiran por la borda (incluso ya muertos), no se arrojen al mar y se los lleven al banco de alimentos. Ojalá lo consiga. Gracias por esta fantástica iniciativa.

Y ahora sí, me despido que este post se esta convirtiendo en la historia interminable. Feliz semana para todos. Nos vemos pronto, un saludo!!

Escoffi.


lunes, 14 de octubre de 2013

TOP CHEF 2: TAPAS, CATERING Y TRAMPANTOJOS

El miércoles pasado pudimos ver la segunda entrega del programa Top Chef. Tras las eliminaciones de la semana pasada empezaba la auténtica competición. Los concursantes se enfrentaron en este programa, a mi jucio, a dos pruebas complicadas y a una que en teoría no lo tenía que haber sido tanto. Pero vamos por partes.

El programa arrancó con una prueba de fuego, que daba la inmunidad al mejor, donde los participantes tenían que elaborar una tapa fría con un ingrediente obligatorio, o chacina o un ibérico. Contaban con un tiempo limitadísimo, pero como dijo Chicote, se trataba de valorar no solo los conocimientos si no también la velocidad.

Muchos de los concursantes optarón aquí por la cecina, acompañándola con frutas y quesos. Creo que no arriesgaron demasiado pero con el tiempo que tenían, a pesar de ser profesionles, tampoco se podía pedir mucho más. 
La verdad es que me sorprendió un comentario de Jesús Almagro sobre la tapa de Hung Fai. Decía algo así como que había hecho un plato de base española y que había arriesgado poco, que ellos mismos deben exigirse más. Y digo que me sorprende porque creo que no fue él precisamente, el que más se "curró" la tapa. Brocheta, cecina, papaya, cecina, papaya y cecina. Y como acompañamiento un poco de confitura de membrillo, que por cuestiones evidentes estaba ya preparada, con un poco de vinagre de módena. 
Al menos Hung Fai, le dió un toque diferente al "simple" melón con jamón, añadiéndole curry y envolviéndolo en unas obleas de arroz. Sin ninguna duda creo que asumió más riesgos Hung Fai que Jesús. Y seguramente ese toque sorprendente fue lo que hizo que Chicote y Urrechu se decantaran por darle al "chino" la inmunidad.
Es muy dificil valorar algo sin probarlo, pero a parte de la tapa ganadora a mí hay dos que me gustaron. Fueron el falso tomate con mostaza verde de Antonio Arrabal y el falso canelón con cremoso de yogur y lomo de Miguel Cobo.

De izqd a dcha: Melón con jamón de Hung Fai, Falso tomate de Antonio Arrabal y Falso canelón de Miguel Cobo.
Insisto en que juzgar algo sin probarlo es muy dificil pero en esta prueba hubo tres tapas que aun sin probarlas fallaban. Hablo de las tapas de Elisabeth, de Borja y de Iván. Flojas, muy flojas. Y no lo digo solo yo. Chicote les dedicó frases como "esto es para una barra de bar con unos chiquitos", "parece hecho por mi abuela" o "no te paso ni una más". A Borja los comentarios de Chicote no le sentaron nada bien, a pesar de que según el, acepta muy bien las críticas.

De izqd a dcha: Menorquina de Elisabeth; Sobrasada y encurtidos de Borja; y tomate relleno de lomo de Iván.

Acabada esta prueba y con Hung Fai como inmune tocó hacer los equipos, al azar, para la prueba siguiente. Consitió en preparar un catering para 100 personas, compuesto por tres platos por equipo y con el único requisito de que uno fuera presentado en un vaso, otro en una cuchara y otro en un plato pequeño.
El azar decidió que el equipo gris estuviera formado por Begoña, Borja, Javier, Elisabeth, Antonio Canales y el equipo naranja por Jesús, Antonio Arrabal, Iván, Bárbara y Miguel. Hung Fai como vencedor de la prueba tuvo la opción de elegir con que equipo se iba, y aquí me volvió a sorprender. Parecía, y solo parecía, que el equipo naranja era el favorito, pero se fue al gris.
Capitaneados por Jesús en el equipo naranja y por Borja en el gris, decidieron, algunos de manera más democrática que otros, cuales serían los platos que prepararían para el catering.

Platos del equipo naranja: ceviche de salón, pollo al cobo y semiesferas de cereza y queso.

Platos del equipo gris: brandada de bacalao con orejones, pipirrana con crema de anchoas y escabeche de apionabo.

Durante el transcurso de la prueba vi varias cosas que me llamaron la atención. En lineas generales ví a los dos jefes de equipos demasiado nerviosos. En la cocina Jesús tuvo frases como "el jefe soy yo" y hasta dió dos golpes en la mesa para intentar frenar la tensión que Bárbara e Iván estaban creando. A Borja lo ví correr, chillar, imponerse y hasta se permitió dar una clase teórica sobre la osmosis a Antonio. Y tener en una cocina como jefe a alguien que pierde los papeles y que pierde los nervios más que nadie no es nada bueno. Efectivamente Begoña, que "los tiene cuadrados", creo que transmitió muy bien lo que todo el equipo pensaba pero que nadie se atrevía a decir.
Una vez en el hipodromo se veía al equipo gris con las ideas mucho más claras, mucho más organizados. El equipo naranja estaba desorientado, nadie tenía claro que tenía que hacer, que ponía cada uno en el plato... Y eso, siendo claros, es culpa del jefe, de Jesús, que tenía que haber organizado y distribuido las tareas y el no hacerlo le pasó factura. 
Y aunque dieron como ganador al equipo gris los comensales dejaron comentarios como "pensamos que para ser profesionales las tapas son muy flojas, no nos ha gustado ninguna, muy planas de sabor todas". Ángel León añadía "nadie mañana se va a acordar de este cóctel" y Susí Díaz decía "ni han sorprendido, ni han emocionado".
A esta prueba me refería al principio del post, como la que en teoría no era tan complicada, que era la más sencilla, teniendo en cuenta que varios de ellos tienen empresas de catering y que el resto son jefes de cocina de restaurantes.

Así que por haber perdido, de entre los integrantes del equipo naranja tenía que salir el eliminado de Top Chef de esta semana. Se lo jugaron en la que para mí, hasta el momento, ha sido la prueba más bonita del concurso. El invitado de honor de la prueba era el chef Diego Guerrero, que haciendo una demostración majestuosa con su "esto no es un huevo" comunicó a los concursantes que la prueba consistia en hacer un trampantojo, es decir, hacer algo que parezca una cosa pero que sea otra.

Plato "esto no es un huevo", trampantojo de Diego Guerrero.

Así que se pusieron manos a la obra. Alucinante el plato de "la sandía que quería ser atún" que hizó Antonio Arrabal, me gusta este tio, y mucho. Que buen profesional y que bien hace las cosas, y todo de forma segura y sin perder los nervios.
Jesús, se decantó por un bacalao a la vizcaina, copiando una receta del chef Josean Alija. Bárbara por un plato de pasta a la boloñesa, con un buen resultado (a pesar de que no confiaba en ella, lo siento). Iván por un falso risotto de su abuela, el plato que menos trampantojo fue. Y miguel por una morcilla, que a falta de manos le dio forma con la nariz, con un aspecto visual bueno, pero según el jurado con un sabor demasiado potente a tinta.

De izqd a dcha: "La sandía que quería ser atún", "Bacalao a la vizcaína" y "Tagliatelle a la boloñesa"



Izqd. el "falso risottode mi abuela".  Dcha la morcilla que viajó al mediterraneo"

El jurado decidió que Iván fuera el eliminado del concurso a pesar de que el defiende que "de sabor era mejor que el de otros compañeros" y que piensa que "hay peores chef que yo en el concurso". Se va del programa sin poder demostrar lo que el dice "soy el mejor cocinero del mundo".

Con esto se acabo la segunda entrega de Top chef, en la que algunos como Bárbara y Hung Fai se resarcieron de su "mal estreno" en el primer programa y donde se vio que los buenos y los favoritos tambien fallan. 
Y de nuevo, ya no queda nada para el próximo programa. Veremos si el nivel y la exigencia sigue aumentando.
Nos vemos pronto, un saludo. Escoffi.


lunes, 7 de octubre de 2013

Opinando sobre... TOP CHEF

La verdad es que desde el miércoles estaba pensando si escribir o no una entrada sobre el concurso que antena 3 estrenó la semana pasada. Me ha costado decidirme, quizás porque no quería que la gente que me conoce pensara que lo hacía desde el rencor, por ser uno de los eliminados en las fases finales del casting para concursar en el programa. Pero os aseguro que este post lo escribo solamente para aportar mi más humilde opinión como profesional de la restauración y no desde el despecho de la eliminación. Así que aclarado esto... ¡vamos al lio!

Arrancó, por fin, la primera edición de Top Chef en España, un programa desconocido para muchos a pesar de sus numerosas versiones en todo el mundo. Un concurso donde once cocineros profesionales luchan por alzarse con el título de TOP CHEF, es decir, ser el mejor entre los mejores. El programa cuenta con un jurado del que poco hay que decir, Susi Diaz, Ángel León y Alberto Chicote, excelentes profesionales y con una trayectoria impecable. Además cuentan con un factor importantísimo y es el valor mediático, que Alberto Chicote ha obtenido en los últimos años gracias a Pesadilla en la Cocina. Factor que el programa quiere rentabilizar, ya que desde la primera emisión se ha podido ver que Chicote es el "jefe del cotarro".

Ángel León, Alberto Chicote y Susi Díaz, jurado de Top Chef

El programa parecía que empezaba con 15 participantes, pero para sorpresa de todos y sobre todo de ellos, aún tenían un último "casting", una última prueba para demostrar quien merecía estar ahí y quien no. 
 Es más que evidente el nivelón que hay en el concurso, encabezado por Jesús Almagro, que haciendo quinielas desde ya, es uno de los muy posibles ganadores del programa. Aunque todo sea dicho, creo que Antonio Canales (chef ejecutivo de la Finca Fuente Pizarro) y Antonio Arrabal (jefe de cocina del ABBA Burgos) no le van a hacer el camino tan placentero. Barrunto yo que por aquí irá encaminado el podio.

Los 15 aspirantes a concursantes de Top Chef

Pero a pesar del nivel yo vi demasiados fallos en la cocina, y digo demasiados porque aun entendiendo que es un concurso, que hay tensión y nervios, hay cosas que como profesionales consagrados que son, no deberían haber pasado.


Lo primero y lo más llamativo fue como Enrique Lozano, el concursante de mayor edad y quizás por eso sorprenda más si cabe, se saltó a la torera una de las normas fundamentales en cuanto a salud e higiene dentro de una cocina. Se hizo un "pinchazo" como dijo él, pero fuera de toda lógica fue incapaz de parar un minuto, ponerse una tirita, un esparadrapo o algo que taponara la herida, y siguió cocinando como si nada, dejando el rastro de sangre allí donde iba. Solo cuando Chicote le dio el alto, decidió ponerse un guante, pero ya era demasiado tarde. Durante la emisión del programa, fue todo un señor, aceptó su fallo y su acertada expulsión. Pero en el Almacén de Top Chef, quiso culpar al jurado de su eliminación y entró en una polémica en la que no tenía que haber entrado, porque la tenía perdida desde el primer segundo. 
No se si quizás vio un poco vampiro a Chicote y quería darle sangre para alimentar su sed... pero creo que con dejar la pechuga de la pintada en su punto (un poco sangrante), Alberto hubiera saciado sin duda toda su sed de sangre. Y para acabar con este señor, en su intento de justificación dijo que lo de los calabacines no era sangre, que era pimentón, porque quería rebozarlos en pimentón. ¿¿Cómoooooo??. 
Definitivamente creo que de una forma u otra este quería cargarse a Chicote.

Enrique Lozano
Otro de los concursantes que de momento me decepciono fue Hung Fai, un cocinero de 40 años, jefe de cocina, que tiene editado un libro de recetas y que tuvo su propio programa de televisión en Canal Cocina. Creo que con su trayectoria y con sus orígenes asiáticos, es imperdonable que cocine la caballa en tempura en dos tiempos. Y creo que más imperdonable tenía que haber sido teniendo en frente al chef de mar. Pero la cosa no acabo aquí y es que en la prueba de la segunda oportunidad, emplató 14 minutos antes el plato que había preparado. Y no era cualquier cosa, eran fideos con bogavante, y son dos ingredientes que preparados con tanto tiempo y teniéndolos que recalentar, tenían que estar más pasados que Pocholo en Ibiza. 

Hung Fai
Hay otra concursante que vi muy torpe, a pesar de sus 25 años en cocina. Es Bárbara Amorós, dueña de su propia empresa de catering y asesora gastronómica de dos restaurantes de New York. En la primera prueba y aunque Susi Díaz lo valoró como positivo, cambio su plato de arroz tres veces. Me hace pensar que alguien que cambia tanto de idea es que tiene poco claro lo que va a hacer o es poco organizada. Pero hasta aquí lo entendí. Como he dicho antes se trata de televisión y poco o nada tiene que ver con un restaurante. Pero en la segunda prueba me reafirmé, efectivamente me parece muy desorganizada. Fue la única que en 90 minutos no acabo el plato, pero no me extraña porque la pelea mano a mano con el rodaballo le consumió demasiados minutos. ¿ Por qué elige una rodaballo si no sabe limpiarlo y cortarlo? Parecía una asesina a sueldo impaciente por acabar la misión y limpiar las pruebas del crimen cuantos antes, con estropajo, eso sí. Miedo daba la forma que tenía de coger la media luna. 
Y a lo que iba, no acabo el plato y eso a mi juicio no le daba derecho a obtener los cuchillos.

Bárbara Amorós
Otro de los concursantes con fallos de primero, como dijo Chicote fue Eduardo Sánchez, cocinero del ministerio de defensa y conocido por dar de comer a políticos de "alto estándar", efectivamente y como comentó el mismo "cocino mejor que hablo". A Eduardo se le notaba el menos fino, el cocinero (no menos digno) de batalla del programa. Pero da un poquito de asco, ver que su caldo estaba preparado con las patas de la pintada, con sus uñas y todas esas sustancias de orígenes desconocidos que llevan en el interior.
A pesar de esto me pareció un concursante muy tranquilo y que sabía lo que hacía, pero claro, para un programa de este calibre no sirve. En mi opinión, creo que hay que hacer algo más que un marmitako para que te abran las puertas de Top Chef. 
Lo que nunca sabremos es si hubiese sorprendido a lo largo del programa o no, pero lo que si sabemos es que el como cocinero se creía a la altura de los miembros del jurado.

Eduardo Sánchez
Del resto de concursantes de momento pocas conclusiones se pueden sacar. Veremos si Iván Hernández, el benjamín, demuestra lo que dice "soy el mejor cocinero del mundo". Si a Borja le es suficiente con su formación autodidacta para competir dignamente. Si Miguel Cobo, seguirá moviéndose al ritmo que marca la sartén mientras saltea los alimentos. Si siempre busca sabores "sabrosos" y no salados en la cocina y si consigue templar esa imagen de hiperactividad no siempre buena en los fogones. Si Begoña presenta siempre así o lo de la tinta de calamar se le fue de las manos. Si Elisabeth sigue siempre con el mismo buen rollo con sus compañeros y si Javier Estevez pelea por una plaza en el podio.
Lástima la eliminación de Erika (me transmitía buenas vibraciones), pero lo de no haber cocinado nunca el ingrediente principal en una prueba de Top Chef, no ayuda en absoluto.

Ya espero con ganas la noche del miércoles para que ahora sí, empiece la auténtica competición por ser el primer Top Chef de España. Y mucha suerte a todos! Estoy al borde del orgasmo con esta moda de los programas gastronómicos en prime time de la televisión en España. Y visto lo visto, tenemos moda para mucho tiempo.
Nos vemos pronto. Un saludo. Escoffi.